Ventura y Borja Jiménez despiden el verano a hombros en Colmenar Viejo

 El cierre de las fiestas de la Virgen de los Remedios en Colmenar Viejo estuvo marcado por el frío, el viento y un ambiente de final de verano que no restaron emoción a una tarde de toros en la que brillaron con fuerza Diego Ventura y Borja Jiménez, ambos saliendo a hombros por la Puerta Grande. El rejoneador volvió a demostrar por qué es número uno en su especialidad, inventándose una faena frente a un toro deslucido, mientras que el sevillano calentó los tendidos con un trazo natural de gran categoría. Emilio de Justo, con el lote más incómodo y deslucido, se marchó de vacío pese a su disposición.

Diego Ventura, otra lección magistral de figura

El caballero de La Puebla reafirmó en Colmenar su condición de máxima figura del rejoneo. Ya en la apertura de plaza, Ventura se encontró con un toro de Guiomar Cortés de Moura que comenzó noble y con buen tranco, pero que pronto se vino a menos. Supo administrarlo con dos rejones de castigo y templar su embestida en una faena medida que fue a más gracias a la exposición en terrenos comprometidos. Dejó rosas y ajustadas banderillas antes de rematar con un rejón de muerte efectivo al segundo intento. Paseó la primera oreja de la tarde.

El cénit de su actuación llegó en el cuarto, un animal deslucido y sin transmisión que exigía imaginación y oficio. Ventura se inventó la faena, levantando al público en varias fases de su obra. Destacó el pasaje sobre Bronce, con una banderilla sin cabezada de enorme riesgo y pureza, que puso la plaza en pie. Después, completó la labor con tres cortas y una rosa de exquisita colocación. Mató al segundo intento y las dos orejas cayeron de manera unánime. En otra lección magistral, Ventura volvió a dejar claro por qué no tiene rival en el toreo a caballo.

Borja Jiménez, calor y naturales de categoría

El torero de Espartinas cuajó una tarde de menos a más, dejando su sello más personal en el sexto, donde logró redondear un triunfo grande. Ya en su primer turno había mostrado lo mejor de su capote, con un recibo a la verónica de categoría, aunque su faena posterior quedó deslucida por la falta de entrega del toro. Pese a dejar un puñado de naturales de trazo largo, falló con los aceros y escuchó silencio tras aviso.

El premio le llegó en el último de la tarde, un toro de distinta condición a sus hermanos, que permitía más. Tras un comienzo medido, Borja se entregó en tandas de naturales de gran trazo, hondos y ligados, que prendieron en los tendidos. Fue una faena de crecimiento, que rompió definitivamente en la fase final con manoletinas ajustadas y un ambiente de triunfo. La estocada casi entera puso broche a una obra rotunda que fue premiada con dos orejas, consagrando a Borja como otro de los protagonistas de la feria.

Emilio de Justo, sin opciones con un lote ingrato

El extremeño no tuvo fortuna con su lote y quedó inédito en cuanto a posibilidades de triunfo. Su primero, protestado desde salida por un defecto de coordinación, resultó incómodo, con una embestida a saltos y descompuesta que impidió toda confianza. Emilio trató de justificarse por ambos pitones, pero la falta de continuidad y de entrega del toro limitó cualquier lucimiento. Mató de estocada desprendida y escuchó silencio.

El quinto, más cuajado y con cierto tranco en los inicios, amagó con dar opciones, pero pronto se rajó y acortó los viajes, viniéndose por dentro y sin fijeza. De Justo lo intentó sobre la diestra, pero la embestida descompuesta se impuso. Concluyó con una estocada y descabello, escuchando ovación tras aviso. Fue una tarde de disposición, pero sin materia prima para destacar.

Balance final

En una tarde de viento frío y ambiente festivo de final de verano, Diego Ventura volvió a impartir cátedra en el rejoneo y Borja Jiménez se entregó con una gran faena al natural para salir ambos por la Puerta Grande. Emilio de Justo, por su parte, no encontró en su lote opciones de triunfo. Colmenar Viejo cerró así sus fiestas con dos nombres propios y el calor de un público que despidió a los toreros con sabor de verano y triunfo.

Entradas populares